domingo, 1 de julio de 2012

Hipnótico doblaje y canción original de 'Gritón' Jay Hawkins

Dramáticamente cómico.

Me he topado con un video muy gracioso de Jimmy Slonina, un showman que ha compartido escenarios con el Circo du Soleil en calidad de payaso, y ha intervenido en piezas teatrales como actor de carácter. En este clip Jimmy muestra sus habilidades actorales en el doblaje del blues 'I put spell on you' ('yo puse un hechizo en ti') cautivándonos con su rostro, el cual no podemos dejar de ver, quizás porque Jimmy prácticamente no pestañea en los 2 minutos 56 segundos que dura la pieza; nada más un sólo un guiño en el primer minuto del blues y en el resto de la melodía el falso cantante, clava su mirada fijamente en nosotros mientras imprime a su rostro una impresionante gama de expresiones faciales.



El doblaje de este "ejecutante maravilloso" nos mantiene pegados al monitor como si estuviésemos poseídos por su trance vocal y facial -a pesar de ser ficticio. La interpretación que hace Slonina de un cantante de blues autoritario, enojado, y de rostro demencial está basado en un artista de los años 50 llamado 'Screamin' (gritón) Jay Hawkins, un showman que no tiene desperdicio, mucho más cómico que Jimmy Slonina, verdaderamente alucinado, y de quien he colocado su video más abajo.

'Screamin' Jay Hawkins fue precursor del estilo conocido como Shock Rock, una expresión del rock que más tarde continuarían y depurarían artistas como Alice Cooper, Kiss, The Who, David Bowie y muchos otros rokeros más.


El extravagante y carismático 'Screamin'Jay Hawkins
(n. 18/07/1929 + 12/02/2000 )


'Screamin' Jay Hawkins fue un artista negro que fue
muy conocido a mediados de los años 50 por sus circenses actuaciones y estética, en ocasiones macabra. Jay Hawkins, llamado 'el gritón' (screamin) por proferir enormes alaridos durante sus actuaciones poseía una portentosa voz -de joven quería ser cantante de ópera- y una delirante teatralidad cuya puesta en escena cambió los modos de tocar el rock.

Las actuaciones de gritón Jay Hawkins eran de lo más excéntricas para la época ya que su vestuario incluía cuero rojo, un bastón de calavera, colmillos tipo jabalí, sombreros estrambóticos, pieles de leopardo y un peinado dividido en tres partes.
Un look tan extraño como su propia vida, una existencia que parece sacada de una novela:

Cuando Jay Hawkins estaba a punto de nacer a su mamá le dieron una paliza en Washington DC y la metieron en un autobús que posteriormente la abandonaría en Cleveland, Ohio, donde finalmente nació con el nombre de Jalacy Hawkins. Inmediatamente después de nacer su madre lo entregó al orfanato local, y ocho meses más tarde una india pies negros lo adoptaría. La nueva madre de Jalacy tenía tantos hijos de padres distintos que Jalacy dijo que nunca estuvo seguro cuántos hermanos tenía.

Imagen tomada de muzieklijstjes.nl

De niño comenzó a estudiar música en el conservatorio de Ohio, y allí aprendió a componer y a tocar piano. A los 14 años de edad Jay Hawkins abandonó sus estudios y mintió en cuanto a su edad para ingresar en el ejército y así poder luchar en la segunda guerra mundial. Una vez en la armada comenzó a tocar el saxo entreteniendo a las tropas, hasta que cayó en manos enemigas en la isla de Saipán luego de fallar en una misión al ser lanzado en paracaídas. Año y medio después es rescatado año y contó que durante su cautiverio padeció tortturas y otros vejámenes. Al terminar la guerra se distinguió en el boxeo y hasta llegó a ganar el Campeonato de Pesos Medios de Alaska en 1949. En 1951 se unó al guitarrista Tiny Grimes para grabar algunas piezas, y es entonces cuando arrancó su carrera musical con una discografía llena de temas referidos al vudú, el demonio, la brujería y diversos rituales alrededor del terror y la parodia, creencias que su madre india le inculcó y que Jay Hawkins nunca tomó demasiado en serio.



Jay Hawkins dijo en una entrevista que su locura, venía de los días en que su madre le pegaba con una correa. "Yo estaba gritando para asegurarme que todos en el barrio pudiesen oír cuando me daban una paliza... Al final me enteré de que estaba preparándome a mí mismo -sin saberlo- para ser Screamin 'Jay Hawkins".

La pieza "I put spell on you" alcanzó la popularidad como ninguna otra canción compuesta por Jay Hawkins, y la historia detrás de esta canción es muy graciosa. Dice Screamin Jay: "Yo quería que fuera una canción blues de amor, pero mi jefe trajo pollo, costillas, y whisky a la sesión de grabación. Todos se emborracharon y salió esta versión extraña, misteriosa. Yo ni siquiera recuerdo la grabación de la canción."

Screamin Jay Hawkins murió un 12 de febrero de 2000 después de someterte a una operación para tratarse un aneurisma y 75 personas alrededor del mundo y de múltiles razas proclamaron ser sus hijos.

Fuentes: vadeultra, fotogramas sonoros, wikipedia, vadeultra, eyeswiredopen, YouTube y
www.jimmyslonina.com


Cuidado con los que casi son psicópatas

¿Alguna vez ha conocido a alguien sumamente encantador, pero egocéntrico y manipulador e incapaz de una relación profunda con quienes lo rodean?

¿O alguien con una exagerada autoestima, explotador, controlador y embaucador e incapaz de sentir culpabilidad o remordimiento?

Estas son las características de los casi psicópatas: individuos que no son criminales o asesinos y no han recibido un diagnóstico de psicópatas.

Pero pueden llegar a causar más daño que los psicópatas diagnosticados.

Eso es lo que afirma el doctor Ronald Schouten, profesor de psiquiatría de la Escuela Médica de la Universidad de Harvard y autor del libro "Almost a Psychopath" (Casi un psicópata).

Estos individuos, dice el autor, están en todas partes, son nuestros políticos, nuestros compañeros de trabajo, nuestras parejas y amigos.

"Y pueden causar mucho daño por la forma en que son capaces de engañar y manipular a los demás", le explica el autor a la BBC.

Víctimas emocionales

Cuando se habla de un psicópata se habla de un individuo que exhibe conductas antisociales extremas.

Este trastorno mental -dice el psiquiatra- se caracteriza por la falta de capacidad para sentir empatía o remordimiento y por la continua violación de los derechos de los demás.

Para un psicópata, los demás seres humanos son objetos que deben ser ignorados o utilizados para lograr sus propios objetivos o la satisfacción de sus intereses.

Un casi psicópata presenta algunas de estas características y aunque puede no causar daños físicos, el impacto emocional en sus víctimas puede ser enorme.

"Todos sin duda en algún momento de nuestra vida manipulamos, mentimos o engañamos a alguien más, en menor o mayor grado", expresa el doctor Schouten.

"Esto es algo normal en cualquier ser humano. Pero un casi psicópata es un individuo que presenta estas características continuamente, en todos los aspectos de su vida y en un grado suficientemente grande para dañar a los demás".

"Uno de los signos característicos de un casi psicópata es la falta de sinceridad, el encanto superficial y grandiosidad con que se presentan ante los demás".

"Y sienten que lo que están haciendo está perfectamente bien, que son personas especiales, que son extraordinarios y pueden lograr lo que quieran en la vida".

Si se encuentra con uno pida ayuda

Los expertos calculan que cerca de 1% de la población mundial presenta tendencias psicópatas y muchos progresan en su vida para convertirse en asesinos o criminales.

Es difícil que un individuo común y corriente se encuentre en su vida con un psicópata.

Sin embargo, según el doctor Schouten, sí hay muchas probabilidades de que nos encontremos frente a frente con un casi psicópata.

Por eso el psiquiatra decidió reunir la evidencia científica disponible sobre esta forma de psicopatía -y su propia experiencia en la clínica- para ayudar a la gente a identificar y saber como enfrentar a un casi psicópata.

El libro también presenta estrategias para los lectores que sientan que caen en este espectro de la psicopatía y "ayudarlos a cambiar su conducta".

El problema, dice el investigador, es que los casi psicópatas a menudo son muy exitosos en su vida y a pesar de la acumulación de víctimas que dejan a su paso, difícilmente intentan cambiar sus conductas.

"Lo que queremos es ofrecer herramientas prácticas para proteger a las personas que se han encontrado con un casi psicópata", dice el doctor Schouten.

"Porque el daño que causan puede ir desde mentiras y engaños menores hasta abuso emocional e incluso violencia física".

"Parecería que estamos hablando de casos raros o inusuales. Pero es muy sorprendente la cantidad de veces que hemos visto los patrones de conducta de los casi psicópatas y la forma como envuelven y manipulan a sus víctimas", agrega.

Y ¿qué hacer si nos encontramos o trabajamos con alguien que presenta esta forma de "casi una psicopatía"?

Según el doctor Schouten hay varias cosas que podemos hacer.

"El consejo más importante -dice- es uno que me dio un profesor en Harvard hace muchos años: no hay que preocuparnos solos".

"Si usted sospecha que la persona a su lado es un casi psicópata, hable con alguien o pida ayuda. Después podrá decidir el siguiente paso".

"Quizás puede ayudar a la persona a cambiar su conducta. Pero en la mayoría de los casos, lo más importante será armarse de coraje para salir de esa relación", asegura el psiquiatra

Fuente: BBC